Lo primero que hemos de dejar muy claro es que la electroestimulación no sustituye al ejercicio activo. Si bien es cierto que se notan los efectos, también lo es que con los electrodos solo se trabaja el músculo. No mueves tus articulaciones ni tampoco haces un trabajo cardiovascular. Por este motivo no es aconsejable que dejes de hacer deporte. La electroestimulación te ayudará, pero es un complemento para otros hábitos saludables.

Lo mismo podemos decir cuando hablamos de perder peso. Hay quien puede pensar que es suficiente con este tipo de gimnasia pasiva, pero la realidad es que no es así. Sí que van vinculados la electroestimulación y unos resultados visibles, sobre todo cuando se trata de perder grasa localizada. Sin embargo, tendrás que hacer ejercicio cardiovascular y seguir una dieta saludable si quieres que estos efectos se mantengan.